En un informe realizado por Noticias RCN, se hizo pública una denuncia que ha hecho revuelo nacional. Tiene que ver con niños indígenas y sus familias que se alimentan de los desperdicios que encuentran en el relleno sanitario de Puerto Carreño.
Según el informe, los niños pertenecen a un grupo indígena, de la comunidad Amorúa en el Vichada, esta situación se presenta desde hace más de un año, fue denunciada por la Defensoría del Pueblo, pero no se ha dado solución a esta problemática.
Fotos Cortesía: Noticias RCN
Frente a esta situación, el alcalde de Puerto Carreño, Marcos Pérez afirma que “se creó un plan de atención integral para esta población indígena, pero es a largo plazo”. La directora del ICBF, Juliana Pungiluppi manifestó que se enviaron al lugar 1,5 toneladas de bienestarina para beneficiar a unas 100 familias.
Serían más de 150 quienes personas las que viven de esta manera, y en una entrevista que le hicieron a una joven llamada Yuliana, relata que proviene de Venezuela, además que en dicho lugar “hay que pelear por las bolsas. El que no agarra se jodió. Yo no me devuelvo a Venezuela ni a tiros, me tienen que matar para irme”. Asimismo afirmó que ese basurero está mejor que el país vecino, “Aquí yo como bien. Yo me quedo acá, yo no me voy más para Venezuela. Volver allá es perder el tiempo”. Concluyó la joven