Esta nueva complicación se presenta en el kilometro 58 de esta importante vía del centro del país, que está cerrada desde el pasado 15 de junio. El nuevo derrumbe fue ocasionado por las fuertes lluvias en la zona.
La situación ya es preocupante porque son más de 30 días que lleva cerrada esta carretera que conecta la capital de la república con la Orinoquia y los Llanos orientales. Los comerciantes que trabajan sobre la vía y zonas aledañas son los más afectados, esto porque las perdidas económicas continúan creciendo.
En días pasados el alcalde del municipio de Guayabetal, Cundinamarca Javier Castro, afirmó que aproximadamente en una semana se habilitaría un paso provisional, pero luego de este nuevo contratiempo, los operativos se extenderán hasta un mes más. Con este tipo de situaciones, los esfuerzos y trabajos de las autoridades se ven insuficientes.