Continúa la diplomacia de alto nivel para poner fin a los combates y las consecuencias de la guerra en Gaza, tras la resolución del lunes del Consejo de Seguridad que exige un alto el fuego inmediato durante el mes sagrado del Ramadán, la primera resolución en evitar un veto.
Tras la abstención de Estados Unidos en la votación, la embajadora Linda Thomas-Greenfield se refirió a la resolución como “no vinculante”, opinión reiterada por otros altos funcionarios en Washington.
En declaraciones al servicio portugués de Noticias ONU el miércoles, el embajador de Mozambique ante la ONU, Pedro Comissário, pidió a todos los Estados que respeten la resolución del Consejo de Seguridad del lunes. Mozambique presentó la resolución el lunes en nombre de los 10 miembros electos del Consejo (E-10) que redactaron el breve texto.
“Las resoluciones emitidas y adoptadas por el Consejo de Seguridad son, por supuesto, vinculantes y obligatorias. Por eso tenemos el Consejo de Seguridad”, subrayó, antes de continuar: “De lo contrario, no habría tenido sentido. Nuestra esperanza es que todos los miembros del Consejo de Seguridad, y aquellos a quienes está dirigida la resolución (me refiero a Israel, la Autoridad Palestina y todos los demás Estados) estén en condiciones de respetar e implementar esa resolución. [No implementar la resolución] es un desafío a la Carta de las Naciones Unidas, a nuestra conciencia humana, a todo lo que nos hace seres humanos”.
Comissário se refirió al simbolismo de la aprobación de la resolución y a la esperanza de que conduzca a la paz: “La cuestión principal es poner fin al conflicto en Gaza, liberar a todos los rehenes detenidos por Hamás y permitir que la asistencia humanitaria llegue a flujo para que podamos brindar una asistencia adecuada al pueblo palestino y en particular al pueblo de Gaza”.
Alrededor de 1,1 millones de personas en Gaza enfrentan “un nivel extremo de inseguridad alimentaria” y no hay alternativa al transporte a gran escala de ayuda por tierra, especialmente para aquellos que enfrentan la perspectiva de una hambruna generalizada en el norte.
La agencia de ayuda de las Naciones Unidas para los palestinos (UNRWA) tuiteó que “el tiempo corre rápido hacia la hambruna en Gaza” y que, aunque la agencia es la columna vertebral de la operación humanitaria, sus caravanas de alimentos “no pueden llegar al norte, donde la hambruna es inminente”.
Jonathan Fowler, oficial superior de Comunicaciones de la UNRWA, describió el norte como el epicentro: “simplemente necesitamos tener acceso para conseguir suministros de alimentos”.
Fuente: ONU