De acuerdo con habitantes de distintos lugares del país que limitan con Venezuela, en las últimas horas aumentó el número de venezolanos intentando cruzar la frontera hacia Colombia por temor a que el nuevo presidente de Colombia corte relaciones diplomáticas con el vecino país.
Desde el fin de semana anterior, a numerosas familias se les ha visto dormir en improvisadas carpas en las que se resguardan de la lluvia y las altas temperaturas, antes de realizar las pericias que permiten ingresar al país. Mientras tanto, quienes quieren hacerlo por la vía documental, esperan en largas filas su turno para que los oficiales de Migración Colombia procedan con los trámites necesarios para su permanencia.
De acuerdo con medios de comunicación en la frontera, entre las familias que intentan cruzar la frontera hay niños, por ello se han creado espacios lúdicos para distraerlos mientas las horas pasan.