La directora del Instituto de Bienestar Familiar, Juliana Pungiluppi declaró que “En el ICBF están muy preocupados, y muy tristes con esas cifras”, pues los datos hasta el momento son lamentables debido a que van 124 menores de edad quemados con pólvora y 161 adultos con lesiones, producto del uso de pirotécnicos en lo que va de diciembre.
El año pasado en todo el mes de diciembre a nivel nacional, hubo 209 quemados y hasta el momento van 285 quemados, entre los que se encuentran 7 casos de amputaciones. Debido a esto, el ICBF realizará un seguimiento a los padres de familia involucrados en casos de quemaduras. El seguimiento se hará en la compañía de defensores de familia o según la gravedad del caso, se realizará una sanción monetaria de 5 salarios mínimos, trabajo comunitario o talleres para que los padres fortalezcan sus competencias de pautas de crianza.
La directora del ICBF asegura que los padres de familia serán investigados por la Fiscalía, por permitir el uso de pólvora a menores de edad que resulten quemados.