“Alarma que el 65,7 por ciento de los fallecimientos corresponde a personas mayores de 60 años, lo que representa una pérdida sensible para los pueblos indígenas, en la medida que nuestros sabios, mayores y ancianos son los encargados de transmitir los saberes milenarios de generación en generación”, indicó el informe de la ONIC.
El documento, que hace seguimiento a la situación de las diferentes etnias del país frente al nuevo coronavirus SARS-CoV-2, señaló que en la actualidad 4.046 indígenas están contagiados y que 1.193 se han recuperado ya.
Asimismo, advirtió que hay 404.406 familias indígenas en riesgo de contagio.
Según la ONIC, la responsabilidad de la situación es del Gobierno colombiano, al que señaló de “impedir que se tomen medidas apropiadas de contención”, convirtiendo el aislamiento preventivo obligatorio “en una medida arbitraria” que deja a los indígenas en una posición de “sálvese quien pueda”.
Al respecto, la ONIC pidió avanzar en la vigilancia epidemiológica comunitaria, haciendo énfasis en la búsqueda activa de casos, así como organizar equipos de reacción inmediata en coordinación con las entidades de salud para atender cada nuevo contagio reportado.
Así también, sugirió a las comunidades indígenas fortalecer la medicina tradicional para la atención y cuidado que puedan presentarse.
Colombia superó el viernes pasado las 10.000 muertes por COVID-19 y se prevé que en el mes de agosto se puedan duplicar los contagios, lo que mostraría que el país entró al pico de la enfermedad, la cual se conoció por primera vez en el territorio nacional el pasado 6 de marzo.
Los últimos datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), revelados el viernes, señalan que en el mundo existen 17.106.007 casos confirmados de contagio y 668.910 muertos por COVID-19, enfermedad respiratoria que deriva en neumonía y cuyo foco inició en diciembre pasado en la ciudad china de Wuhan.