Este miércoles las autoridades confirmaron la muerte de Jair Danilo Calderón Aranda, exguerrillero de las FARC, quien se habría incorporado al Acuerdo de Paz en 2016 y dejado las armas en el Antiguo Espacio Territorial Agua Bonita (Caquetá).
Según el coronel Óscar Lamprea, comandante de la Policía del departamento, el crimen está relacionado con el llamado ‘ajuste de cuentas’.
El Comité Permanente para la Defensa de los Derechos Humanos (CDPH), rechazó los hechos e hizo un llamado a las autoridades para esclarecer este particular y proteger la vida de los demás excombatientes incorporados al proceso.
Solo en el departamento 25 personas en proceso de reincorporación han perdido la vida desde la firma del Acuerdo de Paz en 2016 y aproximadamente unas 290 a nivel nacional han sido asesinadas según Indepaz.
Así mismo, La Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) ya le hizo un llamado al Estado colombiano y le sugirió diseñar un ‘plan de seguridad’ para los excombatientes de las FARC que adelantan su proceso de reincorporación.