Hablar de Jaime Garzón nos evoca a cuestionarnos ¿qué somos como nación? Hablar de un personaje tan amando por los colombianos es preguntarnos qué sembró en nosotros y qué hacemos con ello que sembró. Para pararnos en el contextos e historia de Jaime Garzón y palpar su pensamiento, es menester ir más allá de una noción generalizada de él. Para esto, entra en acción nuestra invitada para revivir desde la cara familiar el pensamiento de Jaime Garzón, con nosotros estuvo la hermana del fallecido Jaime Garzón, Marisol Garzón (Filosofa, teóloga, comunicadora).
Jaime Garzón, quien nace en el año 1960 se encuentra en un momento especifico en la sociedad colombiana, el dialogo con Marisol permite traer y recordar la atmósfera cultural colombiana en la cual crece Jaime y sus hermanos. Época donde se encuentran distintas realidades, como cuenta Marisol, “se enmarcan como hijos de los The Beatles, hijos de una fe guiada por el movimiento de la teología de la liberación, y donde claramente hay un auge comunista. No se deja afuera el núcleo familiar como eje fundamental en el pensamiento de Jaime. Aparte, Marisol, hace una mención significativa a las Hermanas de Nuestra Señora de la Paz, de la Parroquia de San Diego (Bogotá), que para Jaime y su periodo de transición allí, le permite ir construyendo ese pensamiento crítico que lo caracterizo. Marisol no obvia en hablar de lo que significó la Universidad Nacional para Jaime Garzón, y que aparte de su crecimiento académico en tal lugar, Jaime crece personalmente,esto centrado en una relación de afinidad con su primera novia, Inés Másmela.
Bajo la intervención del profesor Jhonny Ochoa invitado del día de hoy, se sintetiza un de las características de Jaime Garzón como sujeto Histórico, “Jaime Garzón se convierte en símbolo de un país, más precisamente de una sociedad; Jaime más allá de lo que decía y pensaba se postula como símbolo de un país, por su accionar”. Bajo voz de nuestra invitada Jeimmy Paola rozo, estudiante de Comunicación Social, se cimienta y articula, según ella, el que hacer del comunicador en el pensamiento de Jaime “Una construcción del país, que al tomar al hombre como ser reflexivo y agente activo de su propia construcción, lo lleve a cuestionarse sobre lo que hace, tomar conciencia de sus actos, juzgarlos, valorarlos, orientarlos, tomar decisiones, realizar opciones y responsabilizarse de sus actos de su vida y de su historia”.
¿En qué ha cambiado la sociedad colombiana de la que hablaba Jaime y la sociedad colombiana que tenemos hoy?
Se podría creer que sigue igual, pero la verdad, está peor, resalta Marisol. Y que más que preguntarnos si éste Estado allá cambiado o no, la pregunta debería girar en torno a ¿qué postura tenemos nosotros frente a éste estado? ¿Cómo se ha venido transformando y situando ese legado para no matarlo, para no simplemente situarlo en alguien que simplemente hizo humor?.
Desde la interpretación de Marisol, éste encasillamiento tiene una tiene la intención de deslegitimarlo. Comienzan a llamarlo él “humorista y periodista” Jaime Garzón, pero de antemano Jaime no tenía formación periodística, contrario es que, gracias a sus dones y forma de ser, haya podido ejercer el periodismo. Él no era humorista, muy diferente es que haya sido un hombre que se valió del humor aprovecho los dones que Dios le dio para poder hacer crítica política. No hacia humor crítico, hacia crítica política. El profesor Jhonny, no deja de resaltar la figura de Jaime como referente de una generación, “Jaime encarna un tiempo axial donde el estado colombiano se está reconfigurando y ésta encarnación de Jaime, aporta con sus excentricidades con sus locuras y logra ejecutar tal reconfiguración en la sociedad colombiana”. Eso significo Jaime para la sociedad colombiana.
Parte 1
Parte 2
Conducen: Simón Antonio Dumett.