La lengua española, también denominada castellano o simplemente español, es el idioma que se habla en España y en Latinoamérica, su fabulosa extensión por todo el planeta Tierra hace que hoy sea una de las lenguas más populares del mundo junto con el inglés.
El anuario ‘El español en el mundo 2019’ del Instituto Cervantes, recogió algunos datos relevantes, por ejemplo, un total de 580 millones de personas hablan español en el mundo, equivalente el 7,6% de la población mundial. De ellos, 483 millones son hispanohablantes nativos, lo que convierte al español en la segunda lengua materna del mundo por número de hablantes. Además, lo estudian casi 22 millones de personas en 105 países. El español es la tercera lengua más utilizada en internet, donde tiene un gran potencial de crecimiento.
El español nació en la península ibérica aproximadamente entre el año 500 y el año 800 o 900 d.C. Es una de las llamadas lenguas romances, que son básicamente versiones modificadas del latín y que fue la cuna del portugués, catalán, rumano, francés, italiano, entre otras. Todas estas pertenecen a su vez al conjunto de lenguas indoeuropeas.
El castellano, en su última revisión en la RAE, contiene más de 93 mil palabras y del total de entradas, 19.000 son americanismos lo que convierte al Diccionario de la Real Academia Española en un diccionario internacional tan español como argentino, ecuatoriano o mexicano. Por su gran expansión el diccionario normativo tampoco incluye, ni de lejos, el total de las palabras utilizadas en los países de habla hispana.
Si bien Colombia es un país multicultural, con diferentes jergas y palabras que se usan dependiendo del departamento, hay palabras del español que, sin duda alguna, desde mi experiencia en la redacción son muy bellas, y quizás muchas veces no son reconocidas por los lectores porque se desconoce su significado.
Por esta razón hoy desde UNIMINUTO Radio hago este artículo con el propósito de que la persona que está leyendo este texto tenga la oportunidad de conocer palabras nuevas que usan los hispanoparlantes, quizás pueden enriquecer su lenguaje o simplemente aclarar el significado de las mismas.
Efímero: Es aquello que dura muy poco tiempo, puede ser llamado algo pasajero.
Superfluo: Algo innecesario, que está de más.
Inefable: Algo realmente increíble, que no se puede explicar con palabras.
Inconmensurable: Es algo enorme, que por su gran magnitud no puede medirse.
Etéreo: Delicado, sutil, perteneciente o relativo al cielo.
Sempiterno: Que durará siempre, que, habiendo tenido principio, no tendrá fin.
Perenne: Continuo, incesante, que no tiene intermisión, que se repite con frecuencia.
Ojalá: Denota vivo deseo que suceda algo.
Compasión: Sentimiento de pena, de ternura y de identificación ante los males de alguien.
Mondo: Limpio y libre de cosas añadidas o superfluas.
Infinito: Que no tiene ni puede tener fin ni término.
Soledad: Estado de aislamiento o reclusión, carencia voluntaria o involuntaria de compañía.
Resilencia: Capacidad de adaptación de un ser vivo frente a una situación adversa.
Melancolía: Tristeza profunda, sosegada y permanente, nacida de causas físicas o morales, que hace que quien la padece no encuentre gusto ni diversión en nada.
Nefelibata: Dicho de una persona: Soñadora, que no se apercibe de la realidad.
Melifluo: Dulce, suave, delicado y tierno en el trato o en la manera de hablar.
Olvido: Cesación de la memoria o afecto que se tenía.
Acendrado: Dicho de algo como una cualidad, una conducta, puro y sin mancha ni defecto.
Serendipia: Hallazgo valioso que se produce de manera accidental o casual.
Inmarcesible: Algo que no se puede marchitar.
Bonhomía: Afabilidad, sencillez, bondad y honradez en el carácter y en el comportamiento.
Nota: Cada uno de los significados puestos en el presente artículo son dados por la Real Academia de la lengua Española (RAE). Sin duda, tenemos una lengua rica en palabras extraordinarias que nos permiten enriquecer nuestro dialecto cada vez más, palabras que pueden cambiar, modificar o dar diferentes intenciones a los textos.