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Luka Modric, el niño de la guerra y ahora Balón de Oro

A sus 33 años, Luka Modric es el nuevo dueño del Balón de Oro y le puso punto final al reinado de Lionel Messi y Cristiano Ronaldo, quienes habían sido los dueños de este premio por 10 años consecutivos, 5 veces cada uno.

“Cuando eres niño siempre tienes sueños. Los míos eran jugar en un gran club y ganar grandes trofeos. El Balón de Oro era todo lo que podía soñar cuando era niño. Es un honor ganar este premio” manifiesta Modric, para describir su año 2018.

Foto: El Clarín

Luka Modric fue protagonista de una infancia difícil marcada por la guerra en su país (Croacia), sin embargo, a pesar de la violencia y de las adversidades que tuvo que pasar con su familia a causa de esa situación, siempre mantuvo vivo su sueño de ser futbolista.

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El 9 de septiembre de 1985, en Zadar, Croacia, nació Luka Modric y se crió en una zona de los alrededores llamada Obrovac, en donde pasó sus primeros 6 años de vida con su madre, su padre y su abuelo.

En 1991 como consecuencia de la disolución de Yugoslavia, a raíz de que Croacia y Eslovenia declararan unilateralmente su independencia y producir que el resto de las repúblicas independientes de la antigua Yugooslavia quisieran hacer lo mismo, se desató una guerra muy violenta durante una década y provocó la muerte de unas 200 mil personas, entre ellos el abuelo de Modric y millones de desplazados, incluido el de la familia Modric, que no tuvieron otra opción que huir a Zadar después de que incendiaran su casa.

En Zadar, su nuevo hogar fue el hotel Kolovare, que se convirtió en un centro de refugiados. Modric pasaba sus días jugando con su balón en el estacionamiento, hasta que un día Tomislav Basic, dueño del hotel y dirigente del Nk Zadar (zona de Dalmacia, Croacia), que no dudó en avisar al club y abrirle las puertas, “aceptábamos a todos los niños para que no estuvieran todo el día encerrados. Luka llegó como un niño muy frágil”, añadió Basic.

Al ser aceptado, Luka y su familia fueron trasladados al hotel Iz, que quedaba al pie del centro de entrenamiento del club. Modric tenía el sueño de jugar en el equipo del que era hincha, el Hajduk, los dirigentes del NK lo ayudaron a que presentara la prueba, pero lo rechazaron por su estatura y contextura delgada.

Luka jugó en las inferiores del NK hasta que a los 16 años, el club más grande de Croacia, el Dinamo Zagreb lo fichó, pero no lo dejó debutar, Modric se fue por un préstamo al Zrijinski en Mostar (Bosnia-Herzegovina) por un año, debutó en la liga más dura de esa región del mundo. Al regresar, se encontró con un nuevo préstamo, esta vez para jugar en la liga croata en el club Inter Zapresic, el técnico de este equipo le prometió la titularidad en los primeros diez partidos.

En el sexto partido con el Inter Zapresic, Luka recibió la convocatoria para la Sub 21 de la selección de Croacia, con apenas 18 años, el Inter se coronó campeón de invierno con 6 puntos de ventaja sobre el Dinamo, equipo que recuperó a Modric para el final de un campeonato que al final ganó.

Después de los rechazos que recibió por parte de muchas personas, Modric dejó atrás todos los prejuicios que tenía por su físico, sus habilidades, capacidades y entendimiento del juego fue lo que hizo que Luka sobresaliera y lo permitió debutar a los 19 años en el club más poderoso de Croacia.

Sólo puedo decir que nunca dudé de mí mismo (…) Yo siempre creí que podía llegar aquí. Gracias a Dios es realidad. Eso no fue una barrera, sino una motivación extra para mí. No necesitas ser robusto para jugar al fútbol”, sostuvo el nuevo dueño del Balón de Oro.

Para el 2008, el Tottenham de Inglaterra, desembolsó 20 millones de euros para comprarlo y cuatro temporadas después, el Real Madrid de España dio 30 millones de euros para hacer efectivo su pase directo al equipo merengue.

Al llegar al Madrid se ganó un lugar en el equipo titular y logró ser protagonista de las 4 Champions, 3 Supercopas de Europa, 3 Mundiales de Clubes, 1 Liga de España, 1 Copa del Rey y 2 Supercopas de España, todo lo que alguna vez de niño soñó.

Foto: Ploged

Tuve un camino difícil en la vida, pero lo importante es no ceder. Hubo obstáculos, hubo altibajos, pero siempre tienes que creer en ti mismo. Uno tiene que luchar contra los problemas para llegar al éxito y alcanzar los sueños. Eso es lo que me llevó a este punto”,sostiene Luka Modric.

A pesar de su buena campaña durante el Mundial de Rusia 2018 con la selección de Croacia, no logró alcanzar ser campeón del mundo, pero consiguió reconocimientos importantes como: Mejor jugador de la última Champions League, además obtuvo el The Best que otorga la FIFA y el Balón de Oro 2018.

| Nota del editor *

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