Los Técnicos de la Secretaría Municipal de Salud, Saneamiento y Medio Ambiente de Pará (Brasil), encontraron a una ballena jorobada sin vida, de 10 toneladas de peso y 11 metros de largo, en la localidad de Soure, en la isla de Marajó, desembocadura del río Amazonas.
El hallazgo de este ejemplar generó misterio, debido a que no se explica cómo pudo haber llegado hasta ese lugar en medio de la selva amazónica. Los expertos tienen varias teorías: una de ellas indica que la ballena falleció en el mar y su cadáver pudo haber flotado hasta la zona donde fue encontrada, mediante el mar agitado y las altas mareas. La otra asegura que, se trataba de una cría de 12 meses, se enredó en los manglares del Amazonas y después fue arrojada a tierra por las olas altas.
Hasta el momento ninguna de las hipótesis es acertada, aunque se desconoce el por qué el animal fue encontrado en ese sitio, el diario The Maritime Herald, sugirió que la muerte de la ballena jorobada pudo haber sido provocada por ingesta de plásticos.