El gobierno de Iván Duque le cambió el nombre por Generación E, además de algunas características en los puntajes, por ejemplo, y en las condiciones para acceder a él.
En ambos casos las críticas se han hecho evidentes. Por tanto, y con el fin de conocer lo que han vivido los estudiantes de promociones iniciales, Espacio de Opinión invitó a dos jóvenes para conocer sus experiencias:
Viviana Molina, de 18 años, boyacense, egresada de la Escuela Normal Superior Santiago de Cuba, con sede en Tunja, y actual estudiante de Diseño Gráfico en la Tadeo; y Santiago Calderón, bogotano, de 20 años, egresado del colegio distrital Nueva Colombia, con sede en la localidad de Suba en Bogotá, y actual estudiante de Administración de Negocios Internacionales en la Universidad del Rosario.
Coincidieron en el buen trato recibido. En la ausencia de discriminación en ambos establecimientos. Un amago presentado en la Tadeo en un comienzo, fue controlado de inmediato con participación de sus compañeros de clase.
Cada uno compartió en Espacio de Opinión los antecedentes de su experiencia, los miedos superados, y los sueños a futuro.
A eso sumaron el temor que para muchos padres implica que sus hijos accedan a universidades públicas, con base en dos argumentos: droga y paros.
Y sin embargo, la práctica ha confirmado que la universidad privada si bien, no hace paros, no se salva del consumo.
Con participación del grupo de estudiantes de la FCC que intervienen en el programa de la Franja Voces en Movimiento, Laura Camila Guerrero, Nicolet Aguilar y Lina María Casallas, el siguiente es el diálogo con los chicos de Ser Pilo Paga.