Perdón, tolerancia y aceptación son comportamientos a los que de nuevo nos invita un columnista. En esta ocasión, el Maestro de la Ética, Javier Darío Restrepo, quien escribe en El Heraldo, de Barranquilla.
Bajo el título de Los de la rosa, Restrepo, afirma en algunos apartes: Durante demasiado tiempo la historia política del país se ha escrito con pólvora, con sangre y con odios partidistas, y se ha pensado en adjetivos, no con razonamientos ni con ideas. Lo comprobó el test que los investigadores de Antanas Mockus les hicieron a dos grupos de uribistas y petristas. Unos y otros dejaron su inteligencia en neutro para adherir y pensar, no con su cerebro, sino con el de su líder.
Y concluye la columna: El nuevo partido, en el que están representados,en primer lugar, 10.600 colombianos que solo habían encontrado viables las soluciones de la violencia, ahora les ofrece la posibilidad inteligente y digna de hacer política de modo pacífico, con los instrumentos de la inteligencia y con una rosa en la mano.
Esta idea, de mantener con tolerancia la posibilidad de cambio por parte de los antiguos guerrilleros, fue también una constante en la conversación sostenida en cabina, con Daniel Álvarez, nuestro compañero y máster, y las estudiantes Laura Andrade, Ángela Bocanegra, y María Fernanda Estupiñán. El deseo de una nueva clase política que evite todas las formas de violencia posible, en contra del pueblo en general.
Que nos eximan de violencia armada, pero también de la que se ejerce mediante excesivos impuestos, falta de oportunidades de educación, salud, empleo… Que quienes accedan a los cargos públicos, ejerzan con respeto, con acciones que abran la posibilidad de una sociedad más equitativa. Que los procesos políticos, económicos y sociales, giren hacia el beneficio de todos.
Así nos inspiró la columna de Restrepo:
Nota del editor: Este artículo fue publicado por primera vez el 19 de septiembre de 2017.