Por: Frank Dilan Hernández Escobar, Sandra Milena Rodríguez Calvo y Karen Tatiana Cardona Ballesteros
El mal estado de la Calle 13 es un dilema que viven los transeúntes de esta zona desde hace 40 años. Debido a que es una de las principales salidas de la ciudad, vehículos de carga pesada, carros particulares, buses intermunicipales, transporte público urbano y motos, son los actores viales que a diario viven este tormento.
Los ciudadanos están cansados de esta situación, pues muchos planes se han socializado, pero pocos (o casi ninguno) se han ejecutado. De hecho, hace un año, el 18 de abril de 2022, la población de Fontibón salió a protestar por el mal estado de la Calle 13, pero sus peticiones se quedaron en el aire.
El mal estado de las vías, los siniestros viales, los choques, los varados y los mal parqueados, son el pan diario, un mal del que no pueden escapar quienes se ven obligados a pasar por ahí para llegar a sus destinos.
Todos los actores viales se arriesgan
En los últimos meses, las decenas de obras de expansión y los constantes reparos en vías y semáforos han empeorado la situación. La población de Fontibón se ha visto gravemente afectada, especialmente aquellas personas que trabajan y estudian, pues a diario deben transitar por este corredor, que gastan horas de su valioso tiempo en el trancón para llegar a sus destinos.
En este juego por ganar tiempo, todos los actores viales se exponen. Incluso, los recorridos de peatones también se convierten en pesadilla, debido a que sin puentes peatonales y con cortos periodos de paso, se ven obligados a pasar sin importar el riesgo que corren sus vidas.
Al respecto, Melissa, usuaria del transporte público, manifiesta: “tomar el transporte en toda la zona es algo que tarda demasiado y toca buscar dónde no hay trancón para tomar el bus y salir medianamente rápido del sector”.
La opinión de las personas que viven y pasan por esta zona
Las personas que residen en este tramo vial manifiestan su inconformidad con el tránsito y expresan la situación que atraviesan a diario.
Patricia comenta de qué manera los más pequeños se ven afectados: “para los niños es muy difícil cruzar ya que les toca correr y para algunos es muy complicado”.
Para Santiago, esta situación se pone peor en época de lluvias: “es muy feo ya que cuando llueve el agua se estanca y es complicado cruzar. Y si uno lo hace mal termina empantanado en los pies”.
Los trancones también les juegan una mala pasada a conductores como Vicente: “es una zona que de por sí es bastante difícil de transitar y en carro los tiempos de espera se vuelven imposibles dejándolo a uno varado por 30 minutos o más. Además, en los semáforos los tiempos de paso son cortos obligando a los conductores a esperar mucho tiempo”.
¿La Calle 13 tendrá otra cara?
Según informó la Secretaría de Movilidad de Bogotá a través de Twitter, un ambicioso proyecto será la solución a los problemas de movilidad de 300.000 habitantes de localidades como Engativá, Fontibón y Kennedy, y de municipios aledaños.
Dicha propuesta planea una extensión de 11.4 kilómetros con un total de 13 estaciones, una estación cabecera y 22 kilómetros de ciclorrutas. Según la misma Secretaría, estas mejoras reducirán el tiempo de viaje hasta en dos horas. Su intención es permitir viajes más cómodos y seguros para toda la ciudad.
El descontento por esta situación que causa tragedias, robos y congestión es general. Se requiere reducir la tasa de accidentalidad de manera urgente, pues las cifras son alarmantes:
Según datos revelados en la ceremonia de los Premios Vía 2023, al cierre de 2022 en Colombia se presentaron más de 1.000.000 de víctimas en accidentes de tránsito. Esta cifra es alarmante, pues aumentó un 17% en comparación con 2021. Además, en ese mismo año, fallecieron 8.200 personas en siniestros viales, cifra similar al casi aforo completo en el Movistar Arena, que tiene una capacidad de 13.000 personas actualmente.
La comunidad espera que la Alcaldía de Bogotá entregue los proyectos en el tiempo pactado y de la mejor manera. Sin embargo, hasta la fecha los avances no han sido los esperados por la ciudadanía. De hecho, la problemática sigue igual y empeorando, debido a que la vía se deteriora exponencialmente provocando trancones largos, accidentes e inseguridad.