La riqueza mundial aumenta considerablemente, pero la desigualdad es el otro factor que incrementa de la misma forma.
Es así como lo demuestra el estudio realizado por el Banco Mundial, organización internacional especializada en finanzas y asistencia, que como principal propósito trabaja para reducir la pobreza y la desigualdad en los países en desarrollo por medio de préstamos con bajos intereses.
Los resultados evaluados hacen referencia a los anteriores veinte años, en donde la riqueza global incrementó un 66%, no obstante, lo dicho no implica que la vida de las personas haya mejorado, es más, la desigualdad ha aumentado proporcionalmente al enriquecimiento inequitativo de otras personas.
A partir de 1995 la riqueza per cápita fue estimada en 128.921 dólares, mientras que, para el año 2014 la riqueza mundial, según el (BM) se estimaba en 168.580 dólares, es decir una tasa real de incrementó 1,3% anualmente.
Para el año 1995 la riqueza per cápita en latinoamérica se contó en 108.167 dólares y se convirtió en la suma de 133.614 dólares para el 2014.