Según la Sociedad Colombiana de Ingenieros (SCI), el gobierno no debe recibir el puente Hisgaura, previo a un estudio por varias deformaciones longitudinales de las vigas del mismo.
“Debido a la geometría que presenta el puente y al estado de agrietamientos, se hace necesario un estudio patológico y el levantamiento geométrico detallado de la situación actual del puente, que incluya además de la fisuración, las deformaciones longitudinales y torsionales de las vigas laterales”, afirmaron Luis Guillermo Aycardi, German Escobar y Armando Palomino, autores del documento de la Sociedad.
Por otra parte el gremio, sugirió la contratación de una auditora independiente, de rango nacional e internacional para realizar el estudio pertinente a dicha construcción, “el hecho de que el puente no haya colapsado, no indica que esté bien diseñado o bien construido”, añadió la Sociedad en entrevistas con diferentes medios de comunicación .
Además de esto, Durán insistió en realizar las pruebas de seguridad que requiere la construcción, con el fin de determinar la afectación que esto podría tener en su funcionamiento y durabilidad.
“El puente que se construyó no es el puente que se había diseñado, entonces el contratista debe hacer una compensación económica por entregar algo distinto a lo que se había contratado”, dijo el ingeniero.
Finalmente la recomendación que realiza la SCI al Instituto Nacional de Vías (INVÍAS), es no recibir el puente, hasta que se realicen las respectivas revisiones, y los análisis que determinen las condiciones del mismo.
INVÍAS no se ha pronunciado al respecto, pero en otras ocasiones el Instituto afirmó que el proceso está a cargo del Fondo de Adaptación.
A continuación el documento firmado por los ingenieros.
La polémica sobre el viaducto se conoció desde 2018 cuando, según un informe dado a conocer por el INVÍAS, el puente Hisgaura, construido por la compañía española Sacyr en la vía Los Curos–Málaga, en Santander, señalaba graves anomalías.