Los ojos del mundo se han posado nuevamente en China ante la presencia de una nueva cepa del virus ‘nCoV’, que muchos investigadores asocian con el virus del SARS, que ocasionó un número considerable de muertos entre el 2002 y el 2003.
Hasta el momento ha dejado tres muertos en China Continental y ha prendido las alarmas en países como Japón, Taiwán, Corea del Sur y Tailandia, entre otros.
En la ciudad de Wuhan, donde se detectó el origen del virus infeccioso, ya se reportan tres fallecidos a causa de esta, así como otros 217 casos de contagios. Se han reportado dos casos más en China, uno en Beijing, la capital de la nación asiática y uno en la ciudad costera de Shenzhen, además de dos casos confirmados en Tailandia, uno en Corea del Sur y uno en Japón.
Según el último análisis realizado por el Centro de Análisis de Enfermedades Infecciosas Globales del Imperial College de Londres, se estima que el número de contagios hasta el pasado 12 de enero podría haber llegada a casi 1.250, según France 24.
Las medidas de seguridad por parte de las autoridades chinas se han extremado ante la masiva llegada de la diáspora de este país desde distintas parte del mundo con motivo de la celebración del Año Nuevo Lunar que se extenderá durante los próximos 40 días y que tendrá su apogeo el próximo 25 de enero.
Se estima que los viajeros que retornan a su nación para celebrar la llegada del nuevo año chino dentro de su calendario, sean aproximadamente 40 millones de personas, de los cuales entre 20 y 22 mil residen habitualmente en Colombia, según datos de la Embajada de este país recopilados por Blu Radio en 2018.
Las investigaciones que lidera la Organización Mundial de la Salud -OMS- en la zona de contagio indican que el virus proviene de una fuente animal aún desconocida y que se propagó rápidamente a través de la venta de pescado en el mercado de la ciudad de Wuhan, la cual se encuentra en total cuarentena, aunque el estamento internacional no descarta otras fuentes de contagio.
Así mismo, la OMS informó que desde el pasado 14 de enero, ya se encuentra cooperando con varios laboratorios chinos en el rastreo secuencial de la cepa, a fin de mantener al tanto a los científicos del mundo. Esta información podrá ser de vital importancia para poder reconocer el origen de la misma y trabajar para su posterior erradicación.
También, entre la OMS y el Gobierno Chino han ahondado los esfuerzos para contrarrestar esta epidemia a fin de que no expanda a nivel global, por lo que ha implementado medidas de prevención en todos los centros hospitalarios del mundo, según informa Radio Francia Internacional. Hasta el momento, el Ministerio de Salud no ha revelado cuál sería el plan de atención para el sistema nacional de salud público y privado en caso de que este virus llegue a territorio colombiano.
El surgimiento de este microorganismo, que causa fiebre, dificultad para respirar y otras infecciones de carácter respiratorio, ha reavivado en los orientales el temor de que se repita lo sucedido con la pandemia del virus SARS que se cobró la vida de más de 800 personas en 37 países entre el 2002 y principios del 2004, además de expresar su inconformidad en las redes sociales, respecto a la falta de información respecto a prevención y manejo de la convalecencia por parte de las autoridades pekinesas.