Ingresar por primera vez a la universidad implica transformaciones y cambios que necesitan una adaptación. El estudiante comienza una nueva etapa de su vida donde debe asumir mayor autonomía y responsabilidad en sus actos.
Nuevas metodologías de estudio, horarios cambiantes, mezclas de creencias, entre otros, caracterizan la vida universitaria. Falconery Guisao López, coordinadora del área de Acompañamiento y Permanencia de Bienestar institucional de la Corporación Universitaria Minuto de Dios, Seccional Antioquia – Chocó, nos acompañó en la Voz de la U para hablar acerca de la inserción a la vida universitaria, explicando cómo debe ser el acompañamiento de la transición del colegio a la universidad y los aspectos influyen en este proceso.
“El paso del colegio a la universidad es una etapa muy importante para los estudiantes que ingresan, el acompañamiento toma real trascendencia porque vienen de un contexto de colegio donde tienen muchos controles, entonces puede suceder que en determinados momentos no sepan qué hacer con ese universo que se les abre cuando entran a la universidad”, mencionó la invitada Falconery Guisao.
El inicio de la vida universitaria abre la posibilidad de conocer otros entornos, lo que conlleva a la experimentación de nuevas realidades que aportarán al proyecto de vida de cada estudiante. Dichos espacios pueden ser tanto beneficiosos como perjudiciales, y ahí es donde la autonomía de cada individuo toma protagonismo en su proceso de desarrollo.
En conclusión, para superar y adaptarse a la transición del colegio a la universidad, es importante optar por una actitud positiva, segura y renovada. El acompañamiento de los padres o la familia es indispensable, ya que depende de ellos disminuir el control y guiarlos hacia una etapa de madurez, en la puedan empezar a decidir sobre lo que la construcción de su futuro.