Pero las preocupaciones parecen no acabar allí. El turno ahora fue en Juan de Acosta, municipio del mismo departamento, que amaneció con sus playas inundadas de basura, con el agravante que para el caso concreto, se han encontrado grandes cantidades de desechos biológicos, entre ellos muestras de sangre.

La aparición de este tipo de desechos, ha generado preocupación entre las autoridades del departamento, dado el riesgo que representan para la salud pública, teniendo en cuenta que una de las principales actividades económicas del municipio atlanticense es la pesca.
Se estima que más de 1.200 toneladas de basura han sido retiradas de los balnearios afectados, según reveló el diario local El Heraldo, uno de los principales medios en dar a conocer la problemática que se viene presentando en la región.
Según Eva Rosa Lemus, residente de la zona y entrevistada por el diario (El Heraldo), “las basuras no han dejado de llegar las playas, todos las mañanas amanecen los residuos y a nosotros nos toca limpiar”.
Para la Asociación de Corporaciones Autónomas Regionales y de Desarrollo Sostenible (Asocars), la situación presentada en algunas playas del Atlántico “es un problema que deja en evidencia el mal uso que le estamos dando a nuestro territorio”.
Desde ya se habla de la necesidad de adecuar los procesos de producción, así como también de la implementación de políticas que junto a campañas educativas logren mitigar los impactos de los procesos industriales en los ecosistemas locales.