Jonas Brander, director de este documental, expresó en los micrófonos de UNIMINUTO Radio que “este proyecto empieza en el 2013 cuando llegué a Colombia por primera vez, más que todo para aprender. Al hacer mucho trabajo político y activista, estoy muy convencido que muchas de las respuestas a los desafíos más grandes que enfrentamos como humanidad, se encuentran en países como Colombia en la sabiduría de los pueblos, en las luchas sociales. Y llegué muy rápido a las historias de Luz Marina Bernal, de las madres de Soacha y de la Guardia Indígena, que son dos referentes muy grandes de la dignidad en el país, de la lucha por la vida”.
En Colombia persiste esta violencia interna y esto se ve reflejado en el documental, “en el hacer de la grabación se viven situaciones complejas, peligrosas, difíciles. Se quería hacer un documental sobre la esperanza, sobre la lucha por la vida, sobre la dignidad, sobre todo lo que podemos aprender de la Guardia Indígena, de Alberto Camayo, de Luz Marina Bernal, es eso, parte del contexto de Colombia que es dentro de un conflicto amargo, dentro de una violencia, un círculo de una violencia que no”, afirmó Jonas.
Es difícil entrar al mercado audiovisual en el país, Brander afirma que, “con los mismos festivales fue muy difícil, se intentó con muchos y no tomaron la película, mientras en Europa entramos mucho más fácil. Y lo mismo con la distribución a salas, hemos hablado con muchísimas distribuidoras por más de un año y medio, luego se busca otra ruta más alternativa y estamos muy felices de tener a Distrito Pacífico”.
Aún quedan funciones en ciudades como Medellín, Cali y Manizales; en Bogotá se van a programar nuevas funciones después de octubre.
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