Alicia quiso ir al autocine con Julio, su esposo de 78 años que, aunque no camina por un problema de rodilla, se mueve con facilidad en su silla de ruedas automática regalada por la empresa en la que trabajó durante 40 años. Julio fue un alto ejecutivo que dirigió la oficina en Bogotá de una multinacional, en otrora un prestigioso directivo asistido por un conductor y secretarias.
Hoy, él y esposa, siete años menor que él, buscan salidas seguras a su encierro por la pandemia. Ninguno de los dos maneja computador, no saben cómo pagar a través de internet, pero Alicia resolvió su visita al autocine con una llamada telefónica que hizo, y un hombre en moto llegó con boletas a la puerta de su casa.
La persona en moto es un mensajero de Ruah60+, una nueva compañía que entró al mercado de la atención y prestación de servicios para personas mayores de 60 años que no entienden cómo o de qué manera funcionan los aplicativos en internet, o les representa riesgo hacer filas en bancos o físicamente no pueden hacerlo.
El nacimiento de esta compañía se da en un momento confuso, convulsionado y para nada previsible, pues esta pandemia cambió las reglas que conocíamos, pero lo que no ha cambiado (al menos por ahora) es la tendencia de envejecimiento de la población de Colombia pues mientras que, en 1985 los mayores de 60 años eran el 3,98%, en 2018 subió al 9,23%, es decir, por cada 100 personas menores de 15 años, 40,4 personas son mayores de 60, según el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE).
Esa fotografía evidencia que la sociedad colombiana se está transformando en una pirámide invertida, en la que las personas mayores de 60 años están en la cima y las menores están en la punta de abajo, un fenómeno similar al de países desarrollados que pone a pensar, entre otras cosas, en la revisión de la política pública de pensión de vejez, algo que no viene a discusión en este artículo pese a que se habla de adultos mayores.
Para Ricardo Mora, CEO de Ruah60+, su empresa nace en respuesta del crecimiento de ese sector de la población del que no se ha sido del todo consciente. “Nacimos porque tiene que haber empresas y emprendimientos que se dediquen a pensar y analizar los servicios que necesitan las personas mayores de 60 años”, afirma al tiempo que explica que, tarde o temprano, “todos nos haremos mayores y necesitaremos del apoyo de otros para la resolución de problemas cotidianos”.
El origen de Ruah60+
Ricardo Mora Ramírez es arquitecto de profesión y ha dedicado buena parte de su vida al acompañamiento de fondos de inversión en proyectos de vivienda para el adulto mayor con alto poder adquisitivo. Estando en ese sector comprendió que, si bien las personas adultas resolvían sus necesidades habitacionales, había una serie de cosas que no quedaban resueltas con el concreto.
Fue entonces cuando llegó la inspiración del cielo, convenció a un grupo de personas (que hoy son sus socios) para darle forma a una idea que llegó como soplo a finales de 2019, tomó forma en el 2020 y, después de modelar el negocio y resolver lo tecnológico, vio la luz en septiembre pasado.
Desde entonces Ruah60+ atiende, en promedio, tres mil servicios al mes que van desde el préstamo de un conductor lleva al adulto a hacer sus diligencias, le presta un técnico que actualiza sus equipos tecnológicos, le da un asistente que le paga recibos o hace trámites de su EPS, entre otros.
¿Cómo funciona?
El funcionamiento es similar al de otras startup como Uber o Airbnb, solo que sin aplicación para dispositivos móviles (por ahora), pero con su base tecnológica desarrollada en el sitio web: https://ruah60mas.co/, presta el servicio personalizado ante las necesidades del adulto mayor.
Por ejemplo, si uno de los adultos o un familiar maneja computador, puede ingresar al sitio web, crear una cuenta y adquirir una membresía con los servicios que necesita. Si no hay computador, también puede obtener la atención a través del canal telefónico. Aunque instalaron una oficina física en Bogotá, esta mutó a lo digital ante la demanda de servicios en tiempos de cuarentena.
Los servicios que prestan
La empresa tiene una oferta de más de trece servicios que se agrupan en cuatro módulos: uno de acompañamiento para el uso de tecnología, otro para acompañar las necesidades del día a día, también está el de conductores familiares-vehículos y, finalmente, el de la prestación de servicios profesionales de mantenimiento en casa.
“Aunque nosotros resolvemos, la idea es que los adultos sigan activos y no dependan de otras personas”, explica Mora quien advierte también que, aunque están enfocados en personas de estratos 5 y 6, ya trabajan en la masificación de los servicios para que cualquier persona, sin importar su nivel socioeconómico, accedan a los servicios mediante el pago de membresías.
“Iniciamos por los estratos más altos con el fin de generar tracción económica, y eso ha posibilitado el apadrinamiento de otras personas que no pueden pagar”, asegura el entrevistado, quien nos adelanta que en marzo de este año presentarán los planes de membresías que irían desde $27 mil pesos COP (el más económico) hasta $52 mil pesos COP con todos los servicios.
Hacia dónde va el negocio
Hacer empresa en tiempos más inciertos que lo acostumbrado puede llevar a una decisión de “tiro al aire”, es decir, nadie sabe dónde caerá la bala. No obstante, Mora tiene la confianza en Dios y en sí mismo para seducir a personas que le han permitido alcanzar el músculo económico suficiente para su emprendimiento.
Así fue como reunió $400 millones de pesos COP (112 mil dólares) de capital para empezar, y aunque apenas van unos cuatro meses de su puesta en marcha, ya atiende más de 1500 clientes de estrato 5 y 6 con 40 empleados, y si cumplen las metas de 2021, podrían ser 80 puestos de trabajo más al terminar el año.
Eso sí, para trabajar aquí se requieren virtudes que escasean, según me cuenta, de cada quince personas que se presentan para trabajar en Ruah60+, solo una pasa. Eso sucede porque “aquí hay una prueba especial de ‘paciencia’, por ejemplo, hacemos una pregunta diez veces de forma distinta, y las diez veces debe ser respondida con respeto y amor (…) La diferencia que tiene Ruah60+ es que estamos capacitados, tenemos espíritu de trato y atención a personas mayores, eso nos diferencia”.
Difícil, pero…
“Diciembre fue un mes muy bueno, pero enero ha sido muy difícil porque, con cuarentenas y picos tan altos de contagio, no hemos crecido como lo deseamos”, así me lo confiesa, pero tiene razón, la empresa no debe ni quiere exponer a sus clientes y tampoco a sus colaboradores, de ahí que él sepa que necesitará de sus socios otra inyección de capital para mantenerse en el mercado y enfrentar el embate de una bajada en ventas, que los lleve a una curva de crecimiento cuando las condiciones cambie.
Si las vacunas contra el coronavirus permiten acercarnos a la relativa normalidad que llevábamos, Ruah60+ estima seducir a 7 mil nuevos clientes en 2020 y para 2024 proyectan de 20 a 22 mil. Su énfasis es Colombia, pero prevén ya su entrada al mercado chileno, argentino y mexicano, donde la población de adultos mayores también crece.
Ojalá las cosas se les den.
Colofón: Ruah es una palabra hebrea que puede significar “Soy vida o soy libertad”, también puede ser “soplo del espíritu santo” que fue, según el señor Mora, el que le dio la idea.