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En UNIMINUTO Neiva, lupa al trabajo informal

A partir de la pregunta ¿cuáles son los factores socioeconómicos que determinan la satisfacción de las necesidades de los vendedores informales del Centro de Neiva?, los estudiantes de Comunicación Social Dayro Alberto Zapata Castro y Miller Alejandro Polanco Rivera abordan la problemática con una visión desde la Ecología Humana.

En su trabajo, los estudiantes de la Rectoría Sur de la Corporación Universitaria Minuto de Dios, UNIMINUTO, en Huila, expresan que “nuestro enfoque se centra en la Teoría del Desarrollo de una Ecología Humana, que se enfoca en las personas y no en los objetos, lo que nos permitirá ver a las personas y sus procesos teniendo en cuenta su calidad de vida, de las posibilidades que tengan para satisfacer sus necesidades fundamentales”.

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Crónica Enfrentando La Realidad

Por Dayro Alberto Zapata Castro y Miller Alejandro Polanco Rivera

Para referirse al trabajo informal como problemática o fenómeno comunicativo no hay que desconocer que vivimos en un sistema económico capitalista que, durante las últimas décadas se ha flexibilizado de maneras muy variadas y que, para ganar dinero en este sistema, no se requiere necesariamente firmar un contrato o trabajar para una compañía. Tener en cuenta esto último permite entender con un poco más de profundidad que las acciones que los individuos realizan en el marco del sistema económico y la estructura social que lo sostiene, termina manifestándose en las prácticas de los individuos y, la manera cómo estos se relacionan y generan la suficiente cantidad de ingresos que les permite ser sujetos económicos activos.

Es característico del trabajo informal su presencia en el espacio público, donde generalmente se desarrollan este tipo de actividades mercantiles simples. Por supuesto, no se pretende reducir el estudio de las ventas callejeras a términos sólo económicos, ya que, en el espacio social construido por las dinámicas de los vendedores, también se manifiestan relaciones sociales que dejan ver un espacio subjetivo creado a partir del tiempo de la permanencia de los sujetos en esta actividad y la afinidad entre las personas que realizan este tipo de oficios.

En concordancia con las formas de trabajo, los individuos están alineados a las lógicas de flexibilización bajo el amparo de una ideología en la que se vende la idea de libertad, seguridad e individualismo. Sin embargo, como varios autores contemporáneos lo mencionan, esta vaga idea de libertad alberga un control sobre la población que flexibiliza el trabajo, pero frena la movilidad social, haciendo parecer que los mercados limitan a los individuos bajo un instrumento de control y dominación ideológica que, prácticamente, le dice a las personas que lugar social ocupar y que, más allá de clasificarnos por nuestras habilidades, lleva a los individuos a incorporar los elementos de dominación ideológica como marcas en el cuerpo, en el que nuestras acciones se manifiestan en prácticas que estructuran, a su vez, nuestras acciones. Esto último puede sonar contradictorio, pero hace parte de un ciclo en el que la estructura social es estructurada, pero a la vez, es estructurante.

Teniendo en cuenta las lógicas de la Globalización nuestro enfoque se centra en la Ecología Humana, entendida ésta como una teoría para el desarrollo que se enfoca en las personas y no en los objetos, lo que nos permitirá ver a las personas y sus procesos teniendo en cuenta su calidad de vida. Lo anterior depende de las posibilidades que tengan las personas de satisfacer sus necesidades fundamentales, lo que nos lleva a preguntarnos por ¿cuáles son los factores socioeconómicos que determinan la satisfacción de las necesidades de los vendedores informales del Centro de Neiva?. En este sentido, si bien la labor de estas personas hace un mal uso del espacio público al ocupar aceras enteras, no se puede desconocer que este es también el espacio que estas personas usan para garantizar su subsistencia. La teoría del Desarrollo Humano contribuye a tener una perspectiva que garantice la calidad de vida de las personas a partir de la relación entre los vendedores informales y la construcción y uso del espacio público, es decir, permitiendo la convivencia solidaria de los ciudadanos y la comunidad a partir de una visión conciliadora.

REFERENCIAS

Neef, M. (1986). Desarrollo a escala humana una opción para el futuro. recuperado de http://www.daghammarskjold.se/wpcontent/uploads/1986/08/86_especial.pdf

Haller. W, Portes, A. (2004). La economía informal. Políticas Sociales. Serie 100. Recuperado de https://core.ac.uk/download/pdf/38673033.pdf

Algarra, M., y Arroyo, M. (2009). La comunicación como categoría básica de lo social: una aproximación a la Escuela de pensamiento social de la Universidad de Chicago. Doxa Comunicación. Revista Interdisciplinar De Estudios De Comunicación Y Ciencias Sociales, (8), 13–24. Recuperado a partir de https://revistascientificas.uspceu.com/doxacomunicacion/article/view/1219

| Nota del editor *

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