Los fallecidos hacían parte de los ex miembros de la guerrilla, quienes, según información preliminar, realizaban campañas voz a voz por el partido Fuerzas Alternativas Revolucionarias por el Común.
El municipio de Antioquía, Peque, ubicado en la subregión de occidente, fue el epicentro del lamentable suceso, que ocurrió el día martes 16 de enero dentro de un parqueadero, así como lo informó en el momento el principal diario de la ciudad de Medellín, El Colombiano.
Aquel suceso se estaría atribuyendo al Clan del Golfo, una organización narcoparamilitar considerada como la más peligrosa, grande y mejor estructurada dentro del país. Una de las especulaciones habla sobre la contrariedad por parte de los cabecillas frente a este asesinato y los miembros que lo cometieron, por lo que causaría discordia entre el grupo al margen de la ley.