No. 1: “Empieza el Matriarcado“
Esta icónica frase que popularizó el personaje de “Nairobi” en la exitosa serie española “La Casa de Papel”, indudablemente, marcó la década pasada la cultura popular ante el resurgir de las ideas feministas que han tomado mucha más fuerza y se han ido tomando paulatinamente distintas esferas de la sociedad. La cultura y el espectáculo no quedaron por fuera de la “Nueva Ola Feminista”, y más aún con el escándalo que dejó perplejo a todo el ‘show business’: el Movimiento “Me Too”.
El destape de varios casos de acoso, chantaje sexual, inequidad salarial y acceso carnal, entre otros delitos dentro de la industria del entretenimiento, hicieron que las mujeres dentro y fuera de la misma, levantaran su voz ante esas injusticias históricas, el momento no podía ser el mejor para la irrupción de esa voz de protesta: el renacer “recargado” de la mujer.
La revelación de más y más escándalos de productores, directores, escritores, actores (y algunas actrices que terminaron envueltas en situaciones incómodas, como el caso de Judi Dench, quien defendió públicamente al ex productor Harvey Weinstein), provocaron un acelerado cambio cultural en el que las mujeres tomaron principal protagonismo en las letras, las tablas, las pantallas y las salas de cine.
Los nombres de Shonda Rhimes, Patty Jenkins, Ellen DeGeneres, las hermanas Wachowski y Elizabeth Swann, entre otras, empezaron a relucir en los créditos de las más importantes producciones de cine y televisión.
En la música, figuras como Billy Ellish, Lizzo, Taylor Swift, Tones and I, Mon Laferte, Rosalía y la fallecida Amy Winehouse, marcaron el parteaguas en la escena sonora con sus letras duras y que llaman al empoderamiento femenino, mismo que en las letras encabezaron Veronica Roth, autora de la saga “Divergente”; Suzanne Collins, creadora del universo de “Los Juegos del Hambre”; E.L. James, la pluma detrás de las “50 Sombras de Grey”; y Margaret Atwood, quien popularizó la novela postapocalíptica “El Cuento de la Criada”.
La “nueva ola”feminista y sus efectos de transformación cultural seguirán prevaleciendo en la década presente, en la que los retos de sociedad respecto al papel, no solo de la mujer, sino de otros actores sociales como la comunidad LGBTI, se irán modificando paulatinamente conforme se vayan cumpliendo sus requerimientos sociales y se genere una apertura de pensamiento en la sociedad contemporánea sobre temas como la inequidad salarial y laboral, la discriminación y la incidencia política.
No. 2: Una red para cada quien
La década pasada también vivenció un cambio desaforado en el escenario tecnológico que pasó de cero a mil en tan solo diez años. De las computadoras personales se dio el cambio a los teléfonos celulares inteligentes o ‘smartphones’, con lo que muchas de las funciones de estos y de otros elementos análogos pasaron a los celulares.
Este cambio tecnológico también fomentó el desarrollo de otras subindustrias como los contenidos, los servicios de valor agregado, la compilación de datos, la filtración algorítmica, y más recientemente, la realidad virtual y la inteligencia artificial.
Entre estos cambios de contenidos, ocurrió la irrupción de las aplicaciones o ‘apps’, que agregan más funciones y se manejan como programas autónomos para celulares, tabletas y computadores. Redes sociales que nacieron en la WWW como Facebook, Twitter o MySpace mudaron sus servicios a estos equipos a los que se les fueron sumando otras páginas, hasta que entidades estatales, bancos, servicios de mensajería, sectores políticos y culturales, se han ido apropiado de este nuevo formato de difusión.
Esto, sumado a la irrupción de nuevos sistemas operativos como Android de Google o los software libre que rompieron el dominio duopólico de Microsoft Windows y iOS de Apple, cambiaron la relación de las personas con la sociedad, desde la realización de trámites, pasando por la generación y obtención de conocimiento hasta las relaciones interpersonales.
Los desarrollo que se dieron en la década del 2010, pondrá pie en el acelerador a partir del 2020 ante las innovaciones de la era informática que, aparte de simplificar la vida de las personas y ofrecerles formas alternativas de entretenimiento, también buscarán cambiar la relación en temas como leyes, contratos, documentos y hasta la digitalización total del dinero gracias al protocolo conocido como “blockchain” o cadena de bloques, pilar de la polémica criptomoneda Bitcoin que, hasta la fecha, ha mostrado cierta fiabilidad en temas de seguridad o ante el avance del Internet de las cosas o la automatización de los elementos cotidianos, para lo que serán necesarias las redes de quinta generación o 5G, las cuales ya se están implantando en Europa, Estados Unidos y Asia. Sin dudas, esta revolución tecnológica traerá sustanciales cambios sociales durante los próximos años.
No. 3: La década de los retos
Los años 2010, con la irrupción de las plataformas de contenido como Facebook o Youtube, también surgieron peculiares formas de hacer llamado a la atención frente a situaciones reales que afectan a muchas personas, o para generar una nueva forma de entretención e interacción social entre muchas personas a nivel mundial: la década del 2010 se convirtió en la década de los retos
Los retos se convirtieron en el auge del contenido en las nacientes redes sociales y lograron un éxito avasallador por la simplicidad y espontaneidad que estos implicaban. Los más exitosos fueron el ‘Harlem Shake’ un baile improvisado en medio de un entorno normal que terminaba con un desenfreno de bailes disparatados y que tuvo su origen en un video realizado por el humorista Filthy Frank y que tuvo auge luego de ser grabado por un pelotón del Ejército Ruso en Siberia.
A estos le siguen el “Ice Bucket Challenge” el cual se hizo para hacer conciencia sobre el mal de la Esclerosis Lateral Amiotrófica y se buscaba recaudar fondos para combatir esta enfermedad, el “Kiki Challenge”, uno de los más peligrosos de hacer, ya que consiste en hacer una coreografía al ritmo de la canción “In my feelings” del rapero estadounidense Drake mientras se mantenía un auto en movimiento, el “Bottle Cap Challenge” en el que los retadores deben destapar una botella de una sola patada y que se hizo popular luego de que este fuera hecho por el actor de peliculas de accion Jason Statham, el Mannequin Challenge, una secuencia en la que un grupo de personas se ubicaban de forma estática como si fueran un maniquí o el “Bottle Flipping”, que se trataba de poner un botella en pie arrojándola al aire.
Pero estos retos también tuvieron implicaciones negativas y que preocuparon a la sociedad por los mortales peligros a los que muchos jóvenes quedaron expuestos como los retos de La Ballena Azul, el Ayuwoki, el Charlie Charlie, el 3 AM y el Momo, en donde quienes accedieron a ellos se expusieron a varias afectaciones psicológicas, muchos cometieron suicidio o daños a los demás o fueron expuestos a situaciones paranormales que ocasionaron graves desordenes mentales y físicos.
De estos retos quedaron muchas risas y unas cuantas lágrimas en los transcurrido de la década, las cuales fueron mermando conforme llegaba el fin del decenio del 2010 y el inicio de la era actual. Se espera que esta nueva década traiga de nuevo el resurgir de estos particulares contenidos, pero con un enfoque más social, ante los retos que se vienen para el mundo en torno a temáticas sociales, ambientales, económicas y culturales.
No. 4: Su Majestad, el Contenido
Con esta explosión de contenido que tuvo la década conforme crecieron las nuevas tecnologías, también se provocó una época aún vigente de disrupción comunicativa en la que la televisión, la radio, la prensa y varios medios de comunicación mutaron hacia la digitalidad. Sin embargo, la televisión fue la que tuvo que vislumbrar el gran cambio con el que las plataformas de video en línea han ido tomando el sitio de preferencia que este ocupó por más de nueve décadas.
Tras la irrupción exitosa de la plataforma de video Netflix a principios de década, el mercado de audiencias que manejaba la televisión había empezado a trasladarse a otros modelos de transmisión siendo en los más jóvenes la predilecta junto con el portal web de videos YouTube. Luego del éxito de Netflix a nivel global únicamente emitiendo producciones ya transmitidas en televisión o en el cine, la empresa de Los Santos (California – EE.UU.) avanza en su consolidación produciendo contenido original en todo el mundo.
A este peso pesado del contenido multimedia, se le fueron sumando otras marcas como Prime Video, división de contenido de Amazon, Apple TV, de la empresa de computadores y más recientemente Disney Plus, propiedad del gigante del entretenimiento Walt Disney Company. Al mismo tiempo, la sonoridad también fue trasladando a la web, ya con el antecedente del éxito detrás de iTunes de Apple, se desarrollan en la década plataformas como Deezer, Soundcloud, Ivoox, Spotify y el resurgir de la página de descargas musicales Napster, reconvertida en una plataforma de paga.
En respuesta a esto, los canales de televisión abierta y de paga han enfilado sus baterías para poder competir de tu a tu con productos innovadores, aunque el dominio en la preferencia de la gente sigue siendo de las plataformas. Su auge ha sido tal que producciones de corte televisivo y cinematográfico como Game of Thrones, Orange is the New Black, Breaking bad, Better Call Saul, Bird Box, Roma y Black Mirror, entre otros títulos, han estado nominados e incluso, han sido galardonados en los más prestigiosos premios del arte audiovisual como los SAG Awards, los Globo de Oro, los premios Emmy y los codiciados Oscar.
Conforme la década del 2010, fue la década de la consolidación de este cambio en el modo de la producción, emisión y distribución de series, películas, noticias y deportes que significó el reordenamiento de las Industrias Creativas y Culturales del mundo, los próximos diez años que empezaron el pasado primero de enero verán la transición definitiva, que si bien no acabará definitivamente con el modelo tradicional de transmisión (al menos en lo que compete a la radio y la televisión) si tendrá una mayor presencia del contenido por demanda o ‘a la carta’, adecuado personalizadamente para cada gusto y usuario, lo que obligará a ampliar el espectro en todo lo referente a ideas, metodos de produccion, talento y tecnología, a fin de mantener la preferencia por parte de los nuevos espectadores multimedia.
No. 5: El Relucir de la Corona
La década culminada también significó un resurgir de una de las instituciones que venía de un pleno desprestigio en las últimas décadas: la monarquía. Los enlaces, uniones, escándalos y polémicas que se desprenden de las familias reales del mundo han dado para volver a acaparar la atención de la sociedad y los titulares de la prensa especializada alrededor del mundo.
Este hipotético resurgir del fervor monárquico en la ciudadanía tuvo su auge en el Reino Unido, con dos sucesos que reavivaron la emotividad de los británicos frente a la corte de la Reina Isabel II: Las bodas del Príncipe Guillermo y Kate Middleton en 2011 y la de su hermano, el Príncipe Enrique (o Harry) con la actriz afroamericana Meghan Markle el año pasado. Estos sucesos que no estuvieron exentos de escándalos, dramas dignos de una telenovela, oposición desde el seno del Palacio Real de Buckingham a las relaciones de sus sucesores y el eterno conflicto entre la prensa y la realeza por su privacidad.
La presencia de dos mujeres con orígenes dispares y estilos totalmente opuestos, porque tienen en comun el hecho de pertenecer al reino más importante entre las naciones que aún conservan un modelo monárquico sin provenir de una familia nobiliaria o tener desde la cuna el título de Princesa. La presencia de Kate Middleton y Meghan Markle en la Corte Real británica reavivó el fervor de los británicos, el cual no se vivía desde la época de la fallecida Princesa Diana de Gales en los noventa. Esto debido a las improntas que ellas le han dado a su paso por los pasillos de Buckingham.
La duquesa de Cambridge (Middleton) se ha mostrado como un mujer diplomática, servicial y supremamente maternal, características que marcan el estilo de la llamada a ser la próxima Reina de Gran Bretaña (tercera en la línea de sucesión junto con su esposo, después del Príncipe Carlos y la duquesa Camila de Cornualles). La hasta hace poco duquesa de Sussex (el pasado 8 de enero, Meghan y Harry anunciaron su dimisión a la corona británica) al contrario, ha mantenido un estilo más rebelde e independiente de su familia política y encausada hacia las obras sociales, por lo que muchos la equiparan a la versión moderna de su suegra fallecida en 1996.
Pero más allá de los líos del corazón dentro de las realezas, la década también quedó marcada por una gran cantidad de relevos de reyes en distintas partes del mundo: En España, el Rey Juan Carlos I abdica por varios quebrantos de salud en 2014 a favor de su hijo, el ahora monarca ibérico Felipe VI, quien asumió oficialmente el 19 de Junio.
La nueva familia real española ha mantenido una relación de amores y odios con sus habitantes, entre la neutralidad del titular del Palacio de La Zarzuela frente a varios temas como el Procés catalán y el tema de la continuidad en la Unión Europea, el ocaso de la imagen de Letizia Ortiz, que pasó a ser la plebeya que conquistó al entonces Príncipe de Borbón y a todo el país con el, a una eclipsada Reina Letizia que ha sido altamente criticada por su temperamento casi autoritario y aislado, y en la que podría ser la esperanza a futuro de la monarquía española: la Princesa Leonor de Asturias, quien a pesar de sus 14 años ha demostrado una madurez asombrosa conectada con el lenguaje y el espíritu de su generación.
Otros cambios importantes en las monarquías mundiales fueron el ascenso del Emperador Naruhito en Japón en 2019 con el que culmina el proceso de transición en las islas niponas luego de que el monarca Akihito presentará su dimisión al cargo en el 2016. También se registraron cambios importantes de mando en Europa, Oriente Medio y Asia (Felipe de Bélgica en 2013, el Rey Guillermo Alejandro de los Países Bajos también el 2013, el Rey de Arabia Saudita Salmán bin Abdulaziz en 2015, el jeque de Qatar Tamim bin Hamad Al Zani en 2013, Abdullah de Pahang, monarca de Malasia en 2019, el rey Maha Vajiralongkorn de Tailandia en 2016, Su Lauvi II de Samoa en 2017 y Tupou VI de Tonga en 2012) quienes han respondido en buena parte a las necesidades de sus habitantes.
No. 6: Justo en la infancia
La nostalgia de quienes crecieron entre la década de los ochenta y los años 2000 fue también uno de los factores que dominó en la década del 2010 al 2019. El cine, la música, la literatura, los videojuegos, la televisión, las redes y hasta la mercadotecnia han recuperado ese anhelo de las generaciones más adultas y una buena parte de la de los más jóvenes por los elementos que marcaron a varias generaciones y que para los pasados diez años marcaron con fuerza su regreso.
Ante el cataclismo que fueron los últimos veinte años llenos de incertidumbre, tensión, malestar social y la irrupción de nuevos paradigmas en la sociedad, han hecho que los ahora adultos, jóvenes y adolescentes hayan adquirido una nostalgia constante por lo bueno de las generaciones pasadas y que de cierta forma, en el caso de los más grandes, les hiciera rememorar sus épocas de la infancia y en los de la generación más reciente, de marcar una propia identidad en la era que ha sido denominada como la del ‘hombre-masa’
Esta era de añoranza por el pasado obtuvo una amplia repercusión ante el avance de la tecnología y la rápida expansión de las redes sociales, junto con las movidas que se han realizado desde las Industrias Creativas y Culturales en el mundo para adquirir piezas legendarias del cine, la TV, la literatura, la música y los videojuegos a fin de que los humanos venideros pudieran conocer de estas. Estas acciones tuvieron éxito mundial, con lo que se generó el mercado del pasado, que ha enganchado a varios segmentos poblacionales y conectado a adeptos de los ‘buenos tiempos’.
Esta tendencia de la nostalgia en presente, difícilmente será superada ante el rumbo social que ha tomado el mundo en varios frente, al punto de llegar a unos niveles de polarización que se teman sean mucho más altos que el de los años previos a las dos guerras mundiales, por lo que el mercado de ayer tendrá un potencial de largo tiempo, o al menos hasta que el futuro se vislumbren mejores tiempos para las nuevas generaciones así como para la presente.
No. 7: La década de la música
Los años 2010 también dejarán una pauta en torno a lo que significó para la música, en donde se empezó a consolidar una especie de partitura global en la que los ritmos electrónicos, la mezcla con tonalidades autóctonas y clásicos del ayer, las bases melancólicas y románticas y una fuerte presencia del género urbano latino y la música en español hicieron posible el nacimiento del playlist de toda una década.
En términos musicales se ha ido homogeneizando el gusto musical entre los más adultos (35 años en adelante) quienes optaron por géneros más cercanos al pop noventero con algo de matices regionales o se refugiaron en los clásicos del rock, el pop, el metal y la balada (ante el creciente inconformismo con los éxitos musicales contemporáneos), los que se encuentran entre los 25 y 34 años actualmente, quienes crecieron con los orígenes del reggaeton, el reggae clásico y la explosión de subgéneros de la electrónica y el EDM como el trap y se han ido acoplando al urbano latino con acentuados matices autóctonos y letras que invitan a la alegría y la fiesta o convocan a la rebeldía y la movilización.
Los que se encuentran en la línea de los 18 y 24 años han optado por gustos más electrónicos ligados a ritmo y sintetizador o sonidos orgánicos creados digitalmente, acompañados de letras cortas e inverosímiles en cierto momento como las de Billie Ellish, Bruno Mars, LMFAO, Pharrell Williams, Rihanna y Drake, entre otros.
Los menores de 17 años han tomado el rumbo de optar en gustos musicales o muy para lo urbano latino, o muy hacia el electro pop anglo, o hacia una tendencia que crece a pasos de gigante en la década y hasta el momento: el KPop, un género musical cercano al pop compuesto principalmente por bandas femeninas o masculinas originarias particularmente de Corea del Sur como lo son BTS, Red Velvet o Black Pink.
Aunque particularmente, muchos artistas del pasado volvieron a resonar con fuerza, en su propia voz, con retoques tecnológicos o en interpretaciones de sus colegas, esto con el fin de rendirles un sincero homenaje ante sus partidas terrenas a lo largo de la década y que sin lugar a dudas, marcaron el parteaguas de lo que hoy son los sonidos que se mantienen en nuestros reproductores.
En lo que respecta a que dominará la música en los próximos diez años, la música en español junto con los ritmos electrónicos seguirán tomando espacios importantes de la movida musical por su particularidad de poderse acoplar a cualquier género y aportar un característico ritmo festivo que pondrá a bailar indiscutiblemente a todo el planeta.
No. 8: La década ‘meme’
La característica primordial de la década del 2010, que se hizo sentir con el auge de los nuevos contenidos entre los jóvenes fue el nacimiento de un nuevo modelo de comunicación que se valió de fragmento visuales e iconográficos para describir realidades comunes en la sociedad, un formato de relación comunicativa que se uso para la sátira y también termino conviritiendose en un arma de doble filo para las generaciones actuales: esta década quedaría para la historia como la era del meme.
De esta nueva forma los jóvenes y adultos jóvenes pudieron expresar su opinión respecto a hechos particulares, desde situaciones hilarantes hasta eventos de incidencia global con una poca de chiste y satirización, y este se fue esparciendo como un virus gracioso por todo el mundo a través de internet y las redes sociales.
¿Y quien no compartió alguna vez los memes de Yao Ming cuando me pareció gracioso, el del gato para decir que tenía otra cosa que no era la que se esperaba, el “Si ya saben como me pongo, pa’ que me invitan” cuando sus amigos saben que es malo para los tragos, el “ok boomer” para dejar una conversación cerrada, el de novio distraído cuando se encuentra en una incómoda situación de pareja o el del Travolta distraído cuando no sabía que estaba pasando?
Al simplificar en muchos casos la forma de lo que se quiere expresar, por sacar muchas sonrisas y algunos enojos, el meme paso como la más innovadora forma de conexión comunicacional en todo el mundo que se quedara en la memoria de quienes vivieron en la década 2010. Y el camino de los memes seguirá en subida por un largo tiempo.
No. 9: La nueva era dorada del cine
La década también significó un nuevo paradigma respecto al séptimo arte, respecto a la irrupción de nuevos actores en la escena como las plataformas de video, las productoras independientes, las nuevas potencias productoras de cine como la India, Europa y Latinoamérica, las cuales han replanteado la visión de las producciones estadounidenses y de otros países con lo que se le ha dado un incentivo para de nuevo a la gente a las salas de cine o al reproductor de su casa.
El éxito que le dio un nuevo aire a la cinematografía se le debe a las historias reales, los heroes y antiheroes, la animación, la apelación a la crítica realidad social y el retorno a los clásicos de antaño con un aire de modernidad
Los argumentos más viscerales sobre el bien y el mal, la delgada línea que se situaba entre estos y las decisiones que inciden entre el heroísmo y la villanía, fueron los protagonistas de la década cinematográfica en donde los éxitos de “Los Vengadores”, “La Mujer Maravilla”, “Escuadrón Suicida”, “Deadpool” las dos últimas partes de “Star Wars”, la surcoreana “Parasite”, “Erase una Vez en Hollywood” de Quentin Tarantino, las sagas de “Misión Imposible”, “John Wick” y muchas otras películas que pegaron de la silla a los espectadores.
También relucieron en la década, las historias detrás de las personas que cambiaron el mundo como en el caso de “La Red Social”, la historia detrás del fundador de Facebook, “Lincoln” retrato viviente del fenecido presidente estadounidense, “12 Años de Esclavitud” un relato viviente de la esclavitud sureña, “Selma” el trasfondo de la lucha por los derechos de los afroamericanos en los años sesenta yo tras memorables como “El Discurso del Rey”, “Nixon/Frost: La Entrevista del Siglo”, “Jobs” y “La Teoría del Todo”
La llegada de nuevos mercados cinematográficos y la presencia de los productores independientes alrededor del mundo, también marcaron un punto de inflexión en el cine respecto a la creación de historias originales más ligadas a las realidades de sus regiones, pero con una estética global que le permita ser asimilable en todo el mundo.
Este escenario es fácilmente reconocible en el ascenso del gusto por los filmes de países como China, India, Japón, Corea del Sur, Francia, España, Argentina, Brasil y México principalmente. Los títulos más destacables de estas regiones son “Life of Pi: Una Aventura Aventura Extraordinaria”, “Locamente Millonarios”, “La Vie en Rose”, “Una Separación”, “Roma”, “Relatos Salvajes”, “El Gran Hotel Budapest” y “La Vida Útil” entre otras.
El Cine Colombiano también tuvo su renacer en esta década ante el incremento de las producciones cinematográficas en los últimos años, sumado a una fuerte inversión en mejorar la técnica, la infraestructura, la búsqueda de nuevos talentos y el incentivo a nuevos creadores de historias, las cuales se han ido ligado a la realidad nacional desde diferentes perspectivas, la comedia, el drama, la acción, el terror, la inmersión y el documental.
Este ‘boom’ del celuloide nacional ha desembocado en la presencia de varias de nuestras producciones en los más laureados festivales de cine en el mundo como Sundance, Cannes, París, Berlín y Venecia, además de ser reconocidos local y regionalmente con amplios reconocimientos como los premios India Catalina y Platino.
Pero sin lugar a dudas, el parteaguas del cine nacional, el que marca un antes y un después en la realización fílmica en el país, lo marca el director Ciro Guerra y su esposa, la productora Cristina Gallego con sus dos obras cumbre: “El Abrazo de la Serpiente”, una inmersión al descubrimiento de las tribus amazónicas colombianas por parte de un investigador alemán y “Pájaros de Verano”, la historia del conflicto entre dos familias de la etnia wayuu en medio de la Bonanza Marimbera.
Estos largometrajes ubicaron a Colombia como un referente de producción a nivel global atrayendo el interés de todo el mundo y logrado estar cerca de la estatuilla más codiciada por todo cineasta: el Premio Oscar de la Academia en la categoría de Mejor Cinta Extranjera.
En lo que viene de la década, se espera que el nuevo brillo del séptimo arte se mantenga con las nuevas producciones que se desarrollarán durante los próximos diez años, en los que se espera que las plataformas como Netflix y Prime Video empiecen a tener una mayor participación y reconocimiento dentro de la industria cinematográfica por la calidad de sus filmaciones como lo demostró el gigante del streaming con sus más recientes producciones “Historia de un Matrimonio”, “El Irlandés” y “Los Dos Papas”, además de que se espera que el ´boom´de las producciones alternativas y de los nuevos países productores (incluyendo Colombia) se mantenga y expanda a lo largo de la década.
*Articulo realizado con el apoyo y asesoria de Daniel Rojas, crítico de cine y colaborador de Datéate al Minuto
No. 10: Que empiece el Juego
Así como la década pasada implicó la irrupción de nuevas formas de entretenimiento desde el cine, la televisión y el Internet, esta le dio un nuevo campo de acción a las principales fuentes de diversión para varias generaciones: los videojuegos.
La reinvención de las típicas consolas de juego casero como la Xbox de Microsoft, la PlayStation de Sony y el Wii de Nintendo (al que se añade como complemento reciente el Nintendo Switch) y el reestreno para estas de juegos que marcaron hito en el entretenimiento electrónico como Super Mario Bros, Nintendo Mario Kart, Call of Duty, Gods of War y FIFA 10-20, atención de expertos jugadores, familias enteras y a quienes solo jugaban por diversión. Pero con el avance de la tecnología representada en el escalado del dominio de los smartphones abrió un nuevo frente para los juegos de video que con el tiempo sería tomado por lo que hoy es el presente de la industria: los juegos de “battle royale”.
Esta modalidad de juego, en la que los jugadores, de manera invidual o en formación de pequeños comandos, deben competir en línea para garantizar ser el último o los últimos en pie, fue tomando fuerza a partir del 2012 con la irrupción de las plataformas que hoy son el referente de esta categoría de juegos como League of Legends, Roblox, Fortnite, Fire Fire y PUBG.
Pero el estandarte de lo que sería esta área de videojuegos virtuales seria Minecraft, juego creado en el 2009 pero que obtendría notoriedad a partir del 2011 por su característica particular de ser un juego de fantasía a base de pixeles en vez de gráficas realistas como las otras plataformas.
La popularidad de estos videojuegos representado en su constante flujo de ingreso de nuevos usuarios y los ya conectados, además de la difusión que han tenido estas plataformas gracias a los ‘gamers’ e influenciadores, generadores de contenido para plataformas como Facebook live y Youtube y los ingresos por mercadotecnia y licencias de marca, hicieron posible que muchos de sus jugadores adquirieran más experiencia en determinados videojuegos al punto de ser considerados como ‘gamers’ profesionales.
Esto originó el nacimiento de una disciplina híbrida entre deporte y entretenimiento y que ha ido tomando popularidad global: los E-Sports: torneos de equipos de máximo cinco personas que compiten en varias rondas de partidas aleatorias bajo la misma premisa: el último equipo en pie gana.
Se espera que para la década actual, los E-Sports y los juegos tanto de Battle Royale como de otras categorías se siga masificando y teniendo una presencia mayor ante el advenimiento de los nuevos avances detrás de la Cuarta Revolución industrial cómo será la Realidad Aumentada, la Realidad Virtual y las conexiones ampliadas vía IoT (Internet of Things o Internet de las Cosas).