El alcoholismo está definido como la incapacidad de controlar el consumo desmesurado de alcohol, esto, debido a una dependencia física y emocional que el mismo genera en el cuerpo, que generan cargas sociales y económicas que perjudican a la persona, a los miembros de su familia, su entorno social, amoroso y laboral.
Es la única enfermedad que habla por si sola. Si una persona deja de beber, ese vacío es reemplazado por otras adicciones, y como es de suponer, todo en exceso es malo. Si la persona no bebe, se puede volver un comedor compulsivo o un adicto al juego, lo que se remite a la manifestación puntual de dicha enfermedad.
Estas afirmaciones están respaldadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS), entidad que se asegura que “cada año se producen 3 millones de muertes en el mundo debido al consumo nocivo de alcohol, lo que representa un 5,3 de todas las defunciones del planeta”.
En diálogo con UNIMINUTO Radio, uno de los coordinadores de Alcohólicos Anónimos (A.A) en Soacha, Cundinamarca, habló sobre las consecuencias que esta enfermedad trajo para su vida. Lo que viene a continuación son aparte de una conversación que concedió.
“En el alcoholismo duré 27 años, el alcohol me cegó y yo tuve que perderlo todo en mi vida para caer en cuenta, perdí mi puesto en la sociedad, perdí mi salud, mi familia y a mi esposa; llegué a la calle y a la droga”.
“Desgraciadamente tuve que tocar un fondo, primero para saber si tenía o no el problema, entonces cuando me vi degradado y humillado, me di cuenta que si era conmigo, paré cuando comprendí que lo único que me quedaba por perder, era mi vida”, dijo.
Entonces, ¿La enfermedad tiene cura?
‘Jimmy’ (nombre que él uso para esta entrevista) habló desde su experiencia y afirmó que, hasta el momento, la ciencia médica no ha inventado cura para esta enfermedad, puesto que no existe una pastilla o inyección que lo haga, también definió al alcohólico como la persona que sufre de una obsesión mental, seguida de una alergia física, “por fortuna mi obsesión hoy desapareció”.
La enfermedad se puede detener. “En una ocasión, un compañero me dijo que sí tiene cura y se da 7 días después de muerto, cuando los gusanos lo hayan desaparecido, ahí se cura el alcoholismo”, dijo.
Como todo problema, también hay una solución, A.A tiene como principal objetivo llevar el mensaje al alcohólico que aún sufre. “Quiero decirle que busque apoyo y ayuda, esa misma que yo como alcohólico encontré hace 9 años”, concluyó.